El mártir corrupto

Hay males que parecen inconmensurables, a los que no se les puede oponer un bien. En ese caso se elige un mal menor con el cual enfrentarlos y se permite que el fin justifique los medios. Esta no es una historia sobre ética de principios, sino un análisis de un caso recurrente en política. En el mundo fantástico de Warcraft, existió un elfo hechicero 1 que vió como su ciudad era invadida por una legión de demonios. Su gente no podía hacerles frente y cada vez perdían más y más territorios. Antes del fin, el elfo decidió servir a los demonios para obtener más poder. Eso le costó la deformación de su cuerpo, la perturbación de sus emociones y el odio de todo su pueblo. Cuando tuvo la oportunidad, ese hechicero deforme y atormentado, cambió nuevamente de bando y comenzó a destruir uno a uno a los líderes de la legión invasora, hasta hacerla retroceder. Terminada la guerra, su gente no le perdonó haber servido a la legión y tampoco aceptó su deformidad. Finalmente, fue desterrado. E...